El pasado día 11 de diciembre tuvimos la suerte de reunirnos en un precioso entorno natural: el Jardín Botánico-Histórico La Concepción, en Málaga. Con esta actividad nuestro club pretendía realizar una reunión en un ambiente diferente, aprovechando una soleada mañana de sábado. Hacia las once comenzaron a llegar los primeros integrantes de la excursión y, poco después, ya estábamos listos y en fila escolar para acceder al jardín, no sí que antes, Rafa, gran conocedor del lugar, nos adelantara la historia de los senderos que estábamos a punto de transitar. Aunque durante esa semana bien podía haberse cambiado el nombre de la costa malagueña a “Costa del viento” (dadas las fuertes ráfagas de los días anteriores), la temperatura acompañó gratamente y un inmenso sol contribuyó a hacer más apacible nuestra improvisada sesión. Porque, por supuesto, la sección estrella en esta ocasión fueron los discursos improvisados.

Aprovechando la decoración navideña que por estas fechas adorna el jardín, nos servimos de cada uno de los escenarios para unir oratoria y naturaleza. Poco después de empezar la caminata encontramos un árbol de los deseos y donde colgamos un papelito con el nombre de nuestro club. A la sombra tantas peticiones, fue Vincent quien nos contaba más historias de este emblemático jardín. Después continuamos nuestra caminata para comenzar la sesión de improvisados en un precioso templete desde donde se divisaba la ciudad. Magdalena se aventuró a iniciar el juego, proponiéndole a Carina “piedra, papel o tijera”. ¿Adivinas qué escogió nuestra secretaria? También Ana subió al escenario para convencernos, aún más, de lo bonitas que son Córdoba y Málaga. Seguidamente, Laura aprovechó la acústica de la cúpula para presentar el villancico que había compuesto para Toastmasters Málaga, basado en el himno del club. La excursión continuó mientras disfrutábamos de botánica y anécdotas, estrechando lazos con los que han sido nuestros compañeros en tantas tardes de jueves (muchas veces tras la pantalla). Continuando con el paseo, nuestro socio Juan elaboró un inspirador discurso gracias a una hermosa frase de Mark Twain. También Ray aprovechaba para hacernos disfrutar con su discurso improvisado rodeado de resplandeciente vegetación. Después Rafa se acomodó en el gran trono real, elaborando una preciosa metáfora del significado que para él tenía este asiento. Y fue el turno de Irene, quien nos relató su relación con el alemán, compartiendo con nosotros cómo comenzó a entusiasmarse con este idioma. No teníamos altavoces, pero todos pusimos música de Rammstein a su discurso. Y llegó el turno de Claudia, quien corrió a la silla de Papá Noel para darle su carta de buenos deseos, regalándonos después su discurso. Junto a la silla también pasó Kees, que tampoco quería llegar tarde a entregar su carta, pues los renos estaban a punto de despegar hacia los cielos. Y hasta nos encontramos con un puente que pudimos atravesar guiados por Hicham, nuestro experto en estas estructuras y quien compartió con nosotros la historia de todos los puentes metafóricos que había tenido que cruzar a lo largo de su vida. Y, como en toda salida, también tuvimos momento de pánico cuando¡horror! ¡habíamos perdido a dos excursionistas! Menos mal que las tecnologías y la paciencia ayudaron. Ya todos reunidos de nuevo, nuestra presidenta Magdalena nos deleitó con las ventajas de lo global y de poder reunir lo mejor de cada región española en la que había tenido el lujo de vivir.

Nuestro encuentro concluyó con un almuerzo rodeado de la fantástica naturaleza que nos había acompañado durante la excursión y con la promesa de repetir muy pronto otra salida, sin duda todo un acierto para celebrar la recta final del 2021.


Desde Toastmasters Málaga os deseamos un Feliz Año Nuevo